martes, 19 de octubre de 2021

Canoa

 


Canoa (1976) es la película más famosa y celebrada del director mexicano Felipe Cazals (recientemente fallecido, el 16 de octubre del 2021, hace 3 días), su mejor película y el máximo legado que deja al cine mexicano. En ésta se cuenta un hecho real, el linchamiento de 5 trabajadores de una Universidad, por el pueblo de San Miguel Canoa, Puebla, en 1968. El filme tiene de falso documental, pero sin mucha sutilidad. No obstante maneja cierta ironía y costumbrismo notable en ello. Después habla del lugar tal cual un documental serio y abre con la nota periodística del crimen. Pronto se convierte en una película de entretenimiento (cine de género), además de reflexiva, sobre estos muchachos excursionistas que hallan el terror en Canoa. Los muchachos hacen una buena recreación, se notan tranquilos, alegres, sanos, relajados. Luego cae la lluvia, una atmósfera propicia. Ellos buscan algún lugar para resguardarse y empieza a maquinarse el crimen, va creciendo y alimentándose la histeria, los miedos azuzados y exagerados frente al comunismo visto como destructor del catolicismo y propulsor de la hegemonía del ateísmo. Es un pueblo dominado por un cura que usa lentes oscuros. Éste cura enardece a las masas, las enoja y las predispone para matar comunistas, reflejando la época y la lucha política del México de fines de los 60s (aunque viene de mucho más atrás), de Latinoamérica y en realidad del mundo de entonces. El cura es un ser político, no solo social, y es un benefactor económico además, fuente de dinero y soporte, ostenta el mayor poder en el pueblo, así es visto como generador de progreso, puso el agua, la luz, caminos, etc en Canoa, un pueblito medio escondido. Cuando se forma la turba gigante con antorchas incluidas y van a la casa del vecino odiado -donde están los excursionistas tomados por estudiantes comunistas- empieza el terror por la puerta grande. En adelante es tortura, frenesí y muerte, por buen tiempo, la imagen del crimen en sí y lo mejor del filme, aunque algo simple, pero más que decentemente recreada y atrapante.