lunes, 14 de noviembre de 2022

La mano en la trampa


La mano en la trampa (1961), del celebrado director argentino Leopoldo Torre Nilsson, es una película interesante, un poquito rara, de narrativa amable, pero tampoco demasiado convencional. Adapta una novela corta de su esposa, Beatriz Guido, quien fue una escritora de cierta fama por esa época. Guido colaboró con el guion. Es un filme que exuda frescura. Retrata una sociedad prejuiciosa, así como convenciones que se tienen que salvar a toda costa, una deshonra emocional que manipula el escenario y hace que la gente opte por acciones extremas, raras. No obstante nuestra protagonista, una muchacha joven llamada Laura (Elsa Daniel) es de cierto aire liberal, o despreocupado en cuanto a la sexualidad, aunque no es una mujer sensual, pero como es bonita despierta fácil atracción. Ese es otro tema del filme, el peligro de tener una sexualidad despierta, o fuera del matrimonio. Laura tiene un noviecito de su edad, medio locuaz, intenso, pero respetuoso, incluso más de lo que aparenta, interpretado por Leonardo Favio. Laura no obstante es algo aventajada en su sexualidad y no teme meterse con alguien mayor y hasta casado, quien es el verdadero demonio del filme, en la actuación de Francisco Rabal como Cristóbal Achával, quien es un playboy, un millonario y mujeriego, aun estando casado. Ahí anida el peligro, Cristóbal destruye finalmente a las mujeres con su actitud de playboy. Pero ésta propuesta es más que esto, sino sería otra cosa, algo muy básico, propio de mensaje simplón sobre simplemente cuidar la sexualidad. La película entre manos un poco es un drama psicológico y en una medida un filme de terror. Esto yace mezclado con cierto aire fresco como de fiesta, propio de la élite que retrata la obra, aun cuando las mujeres de la casa de Laura son costureras, pero ahí tenemos el ejemplo de Phantom Thread (2017), dicha labor puede significar sofisticación y pues las tías y madre de Laura se codean con ésta élite. Otra cosa que influye en el retrato general es que se hallan en un especie de pueblito. El relato parte de la curiosidad de Laura por un pariente que esconde su familia en su misma casa quien dicen que sufre de retardo o hasta puede ser deforme. Con esto de arranque el filme mantiene cierto misterio y es interesante el giro que pega tras el primer tercio de la propuesta cuando Laura se topa con lo que le ocultan de ver, más no oír hablar, ya que éste pueblito es muy entrometido y chismoso, andan pendientes de todo para juzgar. Laura representa a una chica algo malvada, el filme tiene una cierta perversidad secreta o sutil. Laura como viene de un colegio estricto de monjas está como próxima a experimentar cosas, ella es algo extraña. Torre Nilsson le pone una personalidad y acciones que hablan de una chica misteriosa, algo compleja de entender. Aunque no parece inocente o lenta también se comporta a ratos como una simple chiquilla, aunque no por su comportamiento con los hombres, pero en la historia esto le traerá problemas. Es una trama lineal con algún pequeño flashback, pero puede entenderse un poco como que convive en un tiempo el pasado con el presente o el presente con el futuro de una sola persona y dentro en ese mix entra algo de drama psicológico. Puede que solo sea un esbozo, pero eso le pone una dosis más de curiosidad a la propuesta, aunque el filme finalmente va de simple. Tiene además su cuota de cinefilia, se menciona al Marlon Brando muchacho rebelde, a La Dolce Vita (1960) y a Rebeca (1940) y hay en la trama justamente eso.