jueves, 13 de diciembre de 2018

Thunder Road


Es una película que tiene humor pero también harto drama, con un personaje especial, un joven oficial de policía llamado Jim (Jim Cummings), que ha perdido recientemente a su madre y divorciado puede dejar de tener la custodia compartida de su hija de 10 años, Crystal (Kendal Farr), y esto lo derrumba por completo, lo lleva a cometer error tras error.

Jim es una buena persona, aunque el filme se pone un poco perverso con él, en su mirada se puede leer en un momento que parece sopesar el querer asesinar a su ex mujer, ya que no puede vivir sin su hija a quien adora. Y no es el único momento así. El filme que dirige y escribe Jim Cummings juega con esto en pequeñas puestas en escena, muy sencillas, pero notables, como cuando Jim pelea con su mejor amigo y en un momento la cámara deja de mostrarlo para pasar a exhibir a toda la policía alborotada con Jim, y es ahí que la cámara muestra la razón al abrir el campo de visión, y es que Jim inconscientemente ha desenfundado su arma.

Momentos como éste hacen ver al protagonista impredecible, pero aunque puede ser algo violento –aunque no lo admita- tanto como un niño viejo o un tipo muy maduro y un gran orador o una persona desenfrenada que puede dejarse llevar por sus emociones, un tipo de múltiples personalidades, la imagen que más perdura es la del final, de nobleza, cuando salta de humor en humor, del llanto a la alegría, de la conmoción, el enternecimiento, a la plenitud y al agradecimiento de la vida, pero no desde lo fácil, sino desde los peores golpes de la vida, cómo perder a quienes más quieres o quien eres en la sociedad o lo material. Por todo ello, como se percibe, es un filme muy rico en profundidad, y todo desde lo claro, amable y directo.

El filme se enfoca también en los matices de la personalidad, la que no agrada del todo, que tiene altibajos con otros, lo cual puede oírse muy normal, pero aquí se maneja especialmente bien, con la relación de Jim y su hermana o con su ex esposa o incluso con su hija y su madre. El filme va descubriendo puntos débiles en todo el mundo, también producto de situaciones. Ésta propuesta también tiene su dotada cuota de humor, mucho en la verborrea, expresividad facial e intensidad de la personalidad del protagonista. La manera como la película maneja las relaciones humanas es tremenda virtud, inclusive con los afroamericanos, habiendo integración pero mucha naturalidad, poco paternalismo y honestidad. Inclusive descubrir porque se llama el filme Thunder Road tiene un uso logrado, aunque directo, más práctico.