miércoles, 2 de febrero de 2022
Festival de Rotterdam 2022: The last ride of the wolves
Ésta película está producida por Holanda dirigido por un director italiano, por Alberto De Michele. Es una obra que se nota de muy bajo presupuesto, pero tiene creatividad y coge la esencia de su temática y ascendencia, versa sobre los gángsters italianos. La trama es sobre un asalto y robo de dinero de un camión blindado, por los llamados lobos, una pandilla de amigos y familiares a lo Tony Soprano, aunque con menos logro que la figura de éste ya mítico personaje. El filme se centra en Pasquale, quien organiza el robo y quien es el que sale más en cámara y domina la propuesta con una performance más que decente. Se sostiene de su intensidad verbal, de la fuerza emotiva que trasmite, de sus potentes monólogos, y no intenta ser intimidante, es un hombre viejo pero tal cual la figura de los mafiosos de Los Sopranos se ve realista y efectivo. El filme también se sustenta de ir manejando en auto por las carreteras, por las pistas de la ciudad, moviéndose de un lado a otro, día a día, es constante, bastante. Puede mostrarse que es un recurso muy austero, pero te acostumbras, toma forma y propicia identidad al conjunto. Esos montones de viajes en el mismo auto son como se va cocinando el plan y la gente. Pasquale habla con un silencioso chofer que lo llama jefe, un aparente subalterno, más tarde hay un vinculo fuerte ahí muy italiano, que llega hasta dar cierta impresión -quitando un par de cositas- de haber sido participes de un falso documental. Alberto De Michele ha mencionado ser autobiográfico. Es un filme interesante para ver como con muy pocos recursos se hace un filme indie si se quiere sobre algo por lo general gigante como un robo de dinero. Todo luce muy familiar, inclusive vemos reuniones típicas, el aire italiano es muy contundente, aun cuando puede tratarse de italianos migrantes a otro país. El robo dura poco pero se ve bien, tanto como el plan, desde la austeridad máxima.