Hard boiled (1992), de John Woo, es un monumento de película, una de las películas más grandes del género de acción. Su segunda hora está dedicada casi toda a la batalla campal en un hospital como cuartel secreto de venta ilegal de armas y como un jefe gángster, Johnny Wong (Anthony Wong), toma de rehenes a los muchos pacientes del hospital, incluidos los bebés, y empieza a disparar a diestra y siniestra contra todo el mundo cuando la policía intenta controlar la situación, enfrentar a ésta mafia. Ésta hora es brutal, una clase de acción de principio a fin, es harta violencia y bravura de la buena, harto atrevimiento, montón de entretenimiento, acción pura y dura de la más gloriosa. En el medio dos policías unen fuerzas, uno que yace de encubierto en la mafia china, de tanto tiempo que ya ni recuerda bien si realmente no es un gángster, Alan (Tony Leung); y el otro, conocido como Tequila (Chow Yun-Fat), un policía de los más duros, apasionado y osado, pero no tan bien visto por su superior. Chow Yun-Fat hace de un policía loco al tuétano; en un momento entra sólo a enfrentar a un pelotón enorme de la mafia, entra bajando en repel arrojando bombas de humo y disparando sin cuartel. En ésta maravillosa secuencia de acción, previa a la hora final, motociclistas mafiosos son incendiados por los disparos de Chow Yun-Fat. El arranque del filme también es super memorable, con Tequila y su mejor amigo Benny enfrentando
thugs, y un criminal asesino a sueldo especial
que viene aparte,
en lo que fácilmente parece un chifa con mesas con jaulas de aves en éstas, jaulas que hacen de recordatorio de Le Samurai (1967), obra que admira John Woo -y todos los amantes del buen cine-. Hay acribillamientos bestiales en el chifa, de gente común incluida, marca del filme. John Woo sacrifica además personajes creativos en honor de hacer un filme sublime. Tony Leung hace de un policía convertido en fiero gángster, planea como top, alguien que (trasgresoramente) mata fríamente para convencer al resto de criminales, incluido el asesinar a algún policía, aunque también a veces por error, cosa curiosa. Leung interpreta a un tipo melancólico, romántico, que sufre existencialmente con tanta muerte, con quien se ha convertido. Hace grullas de origami, cada una representa una muerte ocasionada por él, fabricando con ellas un estado de culpa latente. Leung hace de un asesino violento y al mismo tiempo sofisticado. Es el opuesto de Chow Yun-Fat que hace de un tipo super campechano y algo bruto en sus ademanes, pero efectivo e inteligente en lo práctico. El gran John Woo se demora en crear personajes, crea personajes notables, tiene varios en ésta película, como el asesino Mad Dog (Phillip Kwok), quien tiene su código de vida propio, su código criminal, aun cuando suele se muy salvaje, casi un cyborg. Así también Anthony Wong esculpe un líder criminal a la altura de tanto loco asesino y policía brutal. Hay una escena donde policías sacan bebés entre tiroteos saliendo de altura por las ventanas. John Woo genera escenas trepidantes, tensas, intensas, cerca del límite, algo polémicas. De esa manera vemos a Tequila cargando un bebé mientras está combatiendo disparos, enfrentando criminales. En otro rato Tequila queda prendido en fuego del cuerpo agarrando al bebé y se salva audazmente. Ojo a ésta "pequeña" escena, super grandiosa, un detallito que pinta de cuerpo entero el filme, una obra de arte.