domingo, 3 de agosto de 2025
Punishment Park
Punishment park (1971), del inglés Peter Watkins es un filme político y social frontal, es como el filme definitivo de una época, que refleja en toda fuerza el conflicto entre los jóvenes socialistas y el gobierno americano. Los jóvenes americanos defienden a las minorías, combaten la guerra de Vietnam y hacen notar las diferencias sociales, la pobreza de su nación, aun cuando EEUU es un país rico y lleno de oportunidades. Se contextualiza en el gobierno de entonces, el de Nixon. El filme es curioso porque es un falso documental, pionero en su tipo. Muy realista cogiendo lo histórico, su tiempo, y también es un thriller, una película de sobrevivencia, donde los policías y militares persiguen a los jóvenes rebeldes, activistas, por el desierto, con la consigna de que intenten huir/llegar hacia una bandera americana (como si les dijeran que le demuestren amor a su nación, tal si fuera un acto de redención o una cura) para al poco tiempo ser perseguidos en un juego donde se insta a pensar en la brutalidad policial y la represión. Es una película que aun siendo tan clara políticamente se da bastante entretenida. A pesar de cierta posible incomodidad es muy dinámica e intensa. Hay juicios donde se da a escoger a los jóvenes revolucionarios entre ir a la cárcel o entrar al punishment park. En estos juicios se ven a los jóvenes un poco fuera de sí, defendiendo con mucha energía sus ideas, frente a jueces y conservadores que chocan ideológicamente de manera abierta, mostrando la furia de ésta juventud y la misma furia del otro lado. Se representan las ideas de cada bando de forma potente, si bien la postura que se expone más es la de la contracultura. Policías y activistas son entrevistados, expresan sus posiciones, enfocándose en la reacción a las protestas. En la huida se desarrolla enfrentamiento y mueren oficiales y también muchachos rebeldes. Se analiza la violencia que se genera por las ideologías. Los malos parecen ser los perseguidores que se ven bien básicos -siguen ordenes; dicen defender simplemente a la gente que paga sus impuestos, manifiestan que no hay otra cosa en ellos- pero uno no empatiza fácilmente con los jóvenes revolucionarios que vemos en pantalla. No son expuestos pacíficos o muy tratables, sino medio histéricos y hippies, aun cuando pueden verse algunos promedio. Hay un retrato que refleja a la gente en esencia, con su algo visto hoy a estereotipo. Cuando el filme se pone distópico, o a lo 1984, en el juego de punishment park parece que estamos ante un thriller puro y duro o la emulación de un juego de video y se vuelve muy disfrutable. A esa vera puedes leer toda la política como superficial, como un background de personajes de acción o como jugadores que hacen una presentación o introducción antes de empezar éste especie de juego mortal mediático. La prensa tiene un rol en ésta exposición de época, que muestra muy lógico al formato documental, aunque los policías los señalan de interesados monetarios. Es una obra seria. La representación política también es interesante de por sí y sorprende su cierta precisión. Es una película que para su época pudo ser bastante polémica, bastante osada, aun cuando tiene igualmente mucho de lúdica. Es una propuesta muy fácil de ver, de entender todo y está muy bien hecha, es de esas películas que aunque son muy políticas pueden gustarle a mucho público, lo cual es una verdadera novedad, sobre todo cuando las películas políticas no suelen ser tan furiosamente entretenidas. Es creativa, aunque perfectamente sencilla, como falso documental. Es bastante representativa de su época, de épocas de mucha lucha social, de guerra fría, de ideologías que se tenían mucho enojo entre sí, de toda esa efervescencia que se podía leer como crisis, y busca de temple.
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