Ésta es
una película de acción muy buena. Pero hubiera sido perfecta sino fuera por la
introducción que se hace del amor de pareja que se exhibe muy propia de
telenovela, pretendiéndose poética, y hasta en la laguna parece comercial de
tv., si bien es importante porque el filme se solventa de ésta relación. Ésta
parte inicial notoriamente romántica luce muy endeble y no es tan breve, parece
de otra película. Incluso el protagonista peca mucho de híper sensible en esa
consonancia, no como un convicto, alguien que ha pasado las de Caín en la
cárcel. Sobre todo cuando su salida implica que seguirá por el camino criminal.
Pero después el filme otorga intrepidez en su acción, se pone realmente
memorable, sin exagerar la grandilocuencia. También con los pergaminos y
maestros que tiene, una novela de Jim Thompson, Walter hill como guionista y
Sam Peckinpah en la dirección, no había pierde. Ali MacGraw en sus 33 años se
luce muy bella, se diría que es irresistible para cualquiera, pero se le
percibe en buena parte frágil para el personaje que tiene y que se necesita
como soporte. De todas formas cumple, no malogra el filme. No es la elección
más idónea, pero da personalidad al conjunto, aun así. Ella no tiene una
carrera con muchas actuaciones; ésta debe ser la mejor que ha dado. La parte
del basurero es bastante emocionante, claro reel del mejor cine de acción. Muy
detallada. Cine puro y duro. Las tomas del recojo hasta el terral te pone a
sentir un paso a paso de mucha potente tensión. Igualmente el desenlace a lo Unforgiven
(1992), con los 6 hombres contra uno es súper atractivo. Full adrenalina.
Produce escenas gloriosas. Doc McCoy (Steve McQueen) con su escopeta y su
revólver, dando la cara, en desventaja, a lo Django (1966), es oro puro.
Finalmente ahí lo vemos al protagonista en toda hazaña. La llegada de los
mafiosos sureños de aire clásico en el carro musculoso parece salida de una de
las mejores películas mexicanas de ajuste de cuentas. Posee una maravillosa
visualidad. Se ve super into the movie, en el contexto americano folk. Ben
Johnson como el capo y político corrupto, con una mirada filosa y a otros ratos
sutilmente pícara, muy sugerente, es tremendo acierto desde el principio hasta
el final. Es un formidable antagonista. Mención especial además de John Bryson
como el contador. Cuando dice que hay que dejar el cadáver en una zanja,
limpiando su rastro y la escena, suena a noir serio. Las persecuciones y
enfrentamientos con la policía también generan muy buena acción. Se nota una
fuerza policial muy poco inteligente, poco previsora, más funcional, como pasar
cerca de un ómnibus sin notarlo, o no poner barricadas en el pase a la
frontera. Pero puede verse como la película de otra época, más light en todo
sentido, más despreocupada. McQueen es sólido como antihéroe, de ladrón de
bancos. Trasmite mucha naturalidad. Tiene un toque de tipo duro muy conseguido,
sin necesitar de posturas intimidadoras, sino todo muy en su normal
expresividad, normal seriedad. Se le ve un hombre rústico, campechano, sin
llegar a ninguna cuota de vulgaridad. Es como que está en el medio de cierto
refinamiento y cierta llaneza. Se le ve un tipo común pero educado. Lo
interesante de él es que así puede concretar roles bastante verosímiles de tipo
duro. La vulgaridad viene con el compinche, Rudy Butler (Al Lettieri, tremendo
secundario) que tiene una sub-trama que inspira ese porno moderno con el
supuesto marido observando ser engañado en una faena sexual y esto se mantiene
en gran parte del filme con la ligera mujer muy bien interpretada por Sally
Struthers, a la que tratan como adolescente boba. Esto se observa perverso,
pero también irónico, como el sentido del humor de un cierto machismo. Pero el
filme se ubica en Texas y en estos relatos predomina el clásico duro rural. La
escena con el viejo cowboy de clase trabajadora pone el sentimiento en pantalla
y la humanidad existencial y de paso consolida sin disfuerzos al dúo. Hay un
fuera de campo sobre un coito por negocios que escenificarlo hubiera aumentado
el realismo y agregado sordidez al filme, pero ésta película es una obra de
cine cuidada y rehúye ello. El fastidio a esa vera se reduce en su efecto pero
es afín a ser usado repetidas veces para discutirlo, habiendo en el aire un
quehacer emotivo, lo cual es curioso en un filme de vaqueros. El robo del banco
es competente aunque no impresionante, luce un asalto sencillo/fácil, de
pueblito y entidad con mil descuidos de seguridad, pero es capital en la
historia, como implica el título. En adelante la propuesta –éste gran thriller
criminal- paga con creces su precio como una notable película. Se mantiene
hasta el final en gran nivel de acción. Lo que sigue es perfección pura.
McQueen representa al hombre que puede tener a cualquier mujer y al mismo
tiempo un tipo sin musculatura, pero capaz de enfrentar cualquier reto físico.
Cuando pasan por la máquina de basura es una representación inteligente de que
pueden con todo, aunque no es una lucha de aquellas como contra lo imposible
que se ve en la realidad más contemporánea del cine de acción, sino una
historia de pueblitos del sur, una historia campechana, que se palpa
sustancial, notablemente real.
lunes, 24 de febrero de 2025
The Getaway
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